Gæstebruger
15. maj 2022
Tras quedarme sin piso yendo a la isla a trabajar tuve la suerte de llegar a Relise y me sentí como en casa. El trato amable, humano, las instalaciones limpias, todo muy organizado hicieron que los 7 días que me alejé en el Hostel fuese increíble. Durante mi estancia conocí a gente maravillosa que iba de vacaciones y la experiencia fue muy buena, en ningún momento me sentí sola. La combinación de bus con Mahón es muy buena, la playa a 9 min, laundry para la ropa sucia a 2 min, terraza para relajarte, tomar sol y tender tu ropa. Todas las necesidades cubiertas y siempre con una sonrisa. Gracias Esteban y Maika por hacerme sentir en casa.
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