Tuve una excelente experiencia en este hotel. Todo estaba muy limpio y se nota que es nuevo. La habitación era amplia y la cama extremadamente cómoda, lo que hizo que mis noches de descanso fueran perfectas. El cuarto de baño también estaba en perfectas condiciones, todo nuevo y bien cuidado.
Las instalaciones del hotel son muy buenas, y aunque el desayuno no tiene una gran variedad debido a que no es un hotel muy grande, estaba delicioso y satisfactorio. Además, la piscina y el bar son un gran plus; es un lugar perfecto para relajarse, darse un baño y disfrutar de las impresionantes vistas de la ciudad y las montañas.
Aunque el hotel no está en la calle principal donde están todos los bares y tiendas, estás a casi cinco minutos caminando, lo que lo convierte en una zona más tranquila. Recomiendo este hotel a cualquiera que busque una estancia cómoda y agradable en Pokhara.
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