El hotel está situado en una de las mejores playas al norte de la isla, aproximadamente a 1.20hs del aeropuerto. La propiedad en general estaba muy bien cuidada y mantenida. Tenía seguridad tanto en la entrada principal como en la zona de playa, por lo que en ningún momento se sintió inseguro. Internet funcionaba perfecto en todo el hotel, por lo que tenías señal incluso en la zona de playa, con excepción del último día que no funcionó correctamente por un rato nomás. La habitación era bastante grande, el baño también y todo se encontraba en buen estado. Todos los enchufes tenían conexiones USB como así también permitían conectar distintos tipos de cables, por lo que ni era necesario usar adaptadores. También dejaban agua de cortesía gratuita todos los días. Absolutamente todo el personal, ya sea de la recepción, de seguridad, del restaurante, etc, fue muy amable todo el tiempo.
El desayuno era muy completo y no le faltaba nada. La comida del mediodía y de la noche del restaurante buffet, en general era buena también, con variaciones diarias. También tiene un restaurante a la carta donde se comía bien y con precios razonables. De lo poco negativo a mencionar era que podría haber habido más reposeras en la zona de la pileta, ya que había lugar para poner más, al menos 8 o 10 seguro. También que el paquete all inclusive, tenía varias restricciones, como por ejemplo, excluir bebidas premium. Pero algunas bebidas no deberían haberse considerado premium, marcas como Absolut, JB, Bacardi, etc, deberían ser lo mínimo. Finalmente hubo algunos cortes de luz, que no duraban más que unos segundos, pero eso parecía ser más un problema de la zona que del hotel en sí y no generó grandes inconvenientes tampoco. En resumen, todo estuvo excelente, con algunas cuestiones menores fácilmente solucionables, pero si volviera a Zanzibar, seguramente me quedaría en el mismo hotel.
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