Gran Hotel del Coto

MUY AGRADABLE EN TODOS LOS ASPECTOS, LIMPIO, CON MUCHAS ACTIVIDADES, BUENA COMIDA, BAÑOS LIMPIOS, HABITACIONES AMPLIAS, HA UN PASO DE LA PLAYA, BIEN ATENDIDO POR EL PERSONAL, CON POBLACIONES BONITAS CERCANAS.

Cuando llegamos pedí por favor una habitación con ducha por problemas, mí gran sorpresa que me dan una con ducha en el suelo, cortina, tapadera WC rota con pelos en el suelo, bueno un desastre. Pedí por favor que me cambiarán y me dan una habitacón con bañera y cortina sin ducha, la tapadera del WC rota, el suelo sucio, las camas con mantas antiguas, pero antiguas,apenas hay wifi. Lo único es que la habitación es grande, pero recomiendo que la gente se lleve el gel de baño, champú,etc., de su casa. La comida poca y regular muy repetitiva. Lo mejor el personal. Por el resto no volvería a repetir.

Hotel de finales de los 80 muy poco reformado. Se le han caído dos estrellas. El DIRECTOR muy poco profesional y con carácter chulesco. Si un cliente viene a quejarse alzando la voz, no puede invitarlo a irse. Tal cual. Lo normal es dialogar e intentar buscar una solución. La comida pésima. No sabías que estabas comiendo porque los carteles estaban revueltos. Los huevos del desayuno estaban fritos y metidos en una especie de horno. Cuando te los comías estaban tiesos y secos. Teníamos pensión completa y tuvimos que salir a comer fuera todos los días y un par de noches. Pagamos habitación para tres adultos y nos ponen un sofá cama. Gracias a la camarera de piso(un encanto) nos proporcionó otro colchón más para que mi hijo pudiera estar “cómodo”. El baño súper antiguo con CORTINA DE DUCHA en la bañera. No había amenity’s para ser un 4 estrellas. Pastillas de jabón y un gel que valía para todo. El armario de dos puertas estrechas para tres personas y cinco días de alojamiento. A ver donde ponemos la ropa. El único espejo está en el baño y es el del lavabo. La habitación estrecha, no más de tres metros, AGOBIANTE. Con el sofá cama abierto era una odisea abrir la mini nevera. Un cartel en la terraza que indicaba que para no romper la estética del hotel, no tendiéramos nada en la terraza pero no había ningún tendedero para los bañadores o las toallas en un hotel DE PLAYA!! El parking 15€ por día y encima era una plazoleta con una zona de sombra. Pasabas la barrera y con suerte podías pillar sombra, sino a pleno sol. Y podría poner más cosas. Hablamos con otros clientes que se sentían engañados. Cabe destacar LA AMABILIDAD DE LOS CAMAREROS EN GENERAL Y RECEPCIONISTAS.