Calm House Hotel Hoi An 1

El Hotel es familiar y agradable, limpio, sin pretensiones y bien atendido y con una piscinita pequeña, pero muy agradable 

Our stay at the hotel has been incredible. We have greatly enjoyed the activities they offered, including the visit to Cham Island and diving. On the other hand, we would like to mention how well we were treated by everyone there. Lastly, we want to thank you for the great pizza made for our farewell. Best regards.

A beautiful location run by very nice and helpful people. Even though we arrived very early, they had our room ready early on. You can get basic breakfast (egg + bread) at a fair price. The location is a little bit off the tourist paths. There are some facilities around and the old town is walkable within 15 minutes, but it's not a central, vibrant area.

Had an excellent stay at this lovely hotel. Rooms were very nicely decorated, location was brilliant and the facilities were very good. The staff were exceptionally friendly and gave us a list of good places to see and eat at. Would definitely return if I go back to How An.

Un accueil comme chez des amis qui nous reçoivent. Un lieu plein de charme et qui est comme une place presque connue où l on se sent bien de suite. Une chambre avec salle de bain, toutes deux spacieuses avec toutes les commodités. Un petit balcon avec vue sur la rivière. Des petits déjeuners inclus très variés. Il y a en a pour tous les goûts. Rosy et Lee sont accueillants et très sympathiques. Merci encore à eux pour tous les services qu ils nous ont rendus. Merci pour toutes les propositions de spectacles et lieux à visiter qu ils nous ont proposés ! Et merci à leur Equipe pour leur gentillesse, leurs sourires, leurs aides aussi. Un endroit chaleureux et rempli de bienveillance. Un coin tout joli et reposant où passer de vraies vacances ! ＜3

Del hotel no puedo hablar, pero me molesta que un hotel pensado para turistas, te tengas que descalzar para entrar. Sólo fuimos a cenar y la experiencia nefasta. Pedimos dos pizzas, cerveza y una botella de agua. Primero nos traen la cerveza, después de más de 40 minutos nos traen las pizzas, que fueron muy majos, pero no había por donde comerla, estaban quemadas y la amalgama de ingredientes y la pinta que tenían no invitaban a comerlas. Al final tras otro rato, les recuerdo lo del agua y nos traen una botella caliente y dos vasos fríos, claro, para beber ese agua con el calor que hacía dentro, sin aire acondicionado, pues una auténtica tortura de Halloween. No sé cómo será el hotel, pero desde luego pizzas no tienen absolutamente ni idea de lo que es una pizza. También tengo que destacar el trato, que fueron muy atentos y simpáticos, sino desde luego me hubiera ido a los 20 minutos de espera. Igual para el alojamiento está bien, pero para comer, no lo recomiendo por nada del mundo. Una pena no colgar foto, porque las pizzas hacían honor a Halloween.