Hotel Continental Balneario de Panticosa

Complejo con 2 hoteles y unos baños termales en un emplazamiento idílico. El hotel Continental, pese a sus 4 estrellas, deja mucho que desear. El wifi funciona regulero, las instalaciones están dejadas, la estética es ochentera y los desayunos son terroríficos por la escasa calidad de los productos. La habitación era amplia, pero con carencias, ventanas mal ajustadas y un baño simplón sin estantes en la ducha, que con su ausencia de puerta, es un coladero de agua. Los baños termales están bien ideados y tienen un circuito bueno, pero nuevamente, parecen sacados de los 80. Conclusión: sirve para pernoctar sin pedirle peras al olmo, y luego huir sin mirar atrás. Una pena; el sitio es espectacular.

Hemos estado dos días y volveremos seguro. La habitación, aunque le falte una capa de pintura, era comodísima y las vistas inmejorables. Vinimos con un pack de escapada romántica en el que nos entraba la cena y las Termas. La comida estaba buenísima y el vino muy acertado. Las Termas tienen gran variedad de piscinas, algunas, como la exteriores, son espectaculares. En general, sumando que los trabajadores son amabilísimos, nos llevamos una sensación de satisfación total.

Había estado alojando en varias ocasiones anteriormente. Después de 7 años he vuelto y me he llevado una gran decepción al comprobar el deterioro y abandono que han sufrido las instalaciones del hotel. El estado de la habitación en la que nos alojamos, la 2117 (desconozco como estará el resto) muy abandonado y el baño lamentable, como se puede apreciar en las fotos. La limpieza brillaba por su ausencia. Moho de meses, o años, en la mampara del baño, juntas de silicona y desagües. Bañera llena de picotazos y desconchones. El servicio de habitaciones se limitaba a estirar las sábanas, doblar las toallas y reponer papel higiénico. Todo ello comprobado por una persona del hotel ante nuestra reclamación en recepción, que al ver el estado de la habitación se llevó las manos a la cabeza e intentó subsanar lo que no habían hecho antes. En resumen, deberían dar “una buena vuelta” al hotel para que vuelva estar a la altura de lo que conocí y disfruté hace algunos años, mientras tanto tendré que buscar otras opciones más satisfactorias.

Contratamos el plan para un dia que incluye 75 min. en las termas y la comida en el restaurante. La comida es en el buffet del restaurante del hotel però de mala calidad y con poca variación. El circuito de las termas es corto y deja que desear. Las instalaciones decadentes y con falta de mantenimiento. Los albornoces se tienen que alquilar porque solo se facilitan de forma gratuita a quin tiene contratado algún tratamiento o los alojados en los hoteles. Lo mejor el entorno, el lago y las vistas. Apetece dar un buen paseo por los alrededores.

No comprendo algunas de las reseñas que he estado leyendo por aquí. El hotel es un lugar agradable en el que estar. La estética no es “ochentera” como he leído por ahí, es moderna, aunque requiere una pasadita de mantenimiento. El spa es muy agradable y bastante completo, sauna de vapor y finlandesa, hammam de piedra caliente, varias piscinas, incluyendo una de contraste, destaca la piscina exterior con vistas a la cascada del Fraile. El entorno es espectacular. El desayuno buffet es correcto, como mucho podría pedir que el café fuera de cafetera en vez de máquina. De la comida en general no puedo hablar ya que opté por comer en otro lugar. Las camas son cómodas, el baño es amplio y la bañera es enorme, aunque de nuevo hay que indicar que la de mi habitación estaba ligeramente picada. El aire acondicionado funcionaba bien y en general mi experiencia fue deliciosa. El paseo junto al lago es precioso. En realidad, creo que lo peor es la carretera de acceso, pero es lo esperable en una ubicación de alta montaña. Además salen de allí varias rutas de senderismo y el propio hotel organiza actividades tanto para adultos como para niños, ya que se da la bienvenida a toda la familia. Yo pienso volver y espero que muy pronto.